Hijo de AMLO venderá mansión en Houston para irse a vivir en Neza

En días pasados, el periodista, filántropo, politólogo, filósofo y futuro presidente; Don Carlos Loret de Mola, publicó una investigación en la que encontró que el hijo más gordito del dictador Andrés Manuel López Obrador, vivía en una lujosa mansión en Estados Unidos, misma que muy seguramente compró con dinero ilícito.

En la investigación, publicada por el medio más confiable del mundo: LatinUs, se encontró que el inmueble, ubicado en Houston, Texas, tiene un valor aproximado de cien mil billones de dólares, ya que sus paredes son de mármol, los pisos están bañados en oro al igual que la mayoría de muebles de la casa y las ventanas tienen vidrio del mamalón a prueba de balas.

El escándalo resultó ser un golpe bajo para la dictadura socialista promovida por López Obrador en México, pues desde que se hizo con el poder mediante un golpe de estado en 2018, ha promovido entre la población que todos sean pobres y que todo su dinero lo regalen a los funcionarios de la mal llamada «Cuarta Transformación», mientras su hijo vive como todo un rey en el país vecino.

José Ramón López Beltrán, hijo mayor del mandatario y pariente directo del Chapo Guzmán, nunca en su vida ha trabajado, pero desde el pasado 2018, comenzó a engordar, se compró una mansión que abarca como cincuenta hectáreas y se casó con Carolyn Adams, una morra bien bonita que conoció mientras se hacía menso en alguna playa de Cancún, gastando el dinero mal habido de su progenitor gracias a Morena.

Esto despertó sospechas de corrupción entre miembros de la oposición, quienes al ser expertos en estos temas, impulsaron la investigación que finalmente desmarañó toda la ola de corruptela en la que vive la familia de López.

Carlos X. González y Mexicanos Contra la Corrupción, argumentaron que, al tratarse de un ciudadano común y corriente, José Ramón no debería vivir bajo estos ostentosos lujos, pues este estilo de vida únicamente es apropiado para políticos, empresarios y algunos periodistas honestos, como el mismo Carlos Loret de Mola.

Por esta razón, y para evitar que la dictadura socialista decaiga, el hijo de AMLO anunció que venderá dicha propiedad para asumir una vida austera en un departamento rentado de Nezahualcóyotl, en el Estado de México.

«Quiero que dejen en paz a mi papá, que no tiene la culpa de mis tonterías. Por eso, he decidido irme a vivir rodeado de ustedes, el pobre proletariado, para demostrar que somos iguales y no porque mi papá sea el hombre más poderoso de México, no pueda convivir con gente que no se baña«, explicó en redes sociales.

El piso que habitará desde mañana se encuentra ubicado en la calle Mirasoles, esquina con Fray Servando, y cuenta con dos habitaciones, un baño y medio con regadera, una azotehuela y un cajón de estacionamiento. La renta mensual será de $2,000 pesos y no pagará luz eléctrica, pues mandó a poner un diablito para estar más acorde con la banda.

Se espera que con esta decisión, la popularidad del dictador López vuelva a crecer, pues ya está preparándose para reelegirse este 2022 y finalmente terminar de convertir a México en Venezuela, sin que nadie pueda impedirlo, ni siquiera la oposición conformada por el PRI, PAN y PRD, quienes son la última esperanza para este pueblo.