Tragedia en la villa: cientos de peregrinos denuncian que «perdieron su silla»

El episcopado mexicano ya vendió los derechos para que se filme una película de los hechos.

Aseguraron que se robaron todos los reposets que habían sacado en Elektra.

Villita.- Tras el festejo guadalupano de este año, las delegaciones, fiscalías y ministerios públicos en todo el país se saturaron con cientos de personas que denunciaron el robo de sus sillas, tras acudir como peregrinos a la villa de Guadalupe.

«Me vine desde Tlalnepantla con harta emoción a la villa para ver a mi morenita, pero resulta que llegando a casa ya no estaba mi silla favorita y ya no sé si me la robaron o la perdí«, acusó Amparito Gámez, devota.

Según las primeras investigaciones, los hechos podrían estar relacionados con una antigua maldición mexicana que surgió en la época colonial e indica que «el que se fue a la villa perdió su silla«.

«Mi agüelita siempre me decía eso, pero no le creí hasta ahora que se me ocurrió juntarme con la peregrinación ciclista que sale de mi colonia y ahora que regresé ya no estava el reposet que saqué en abonos de Elektra«, lamentó Melesio Rosas, oriundo de Tepeji.

Aunque se cree que no es la primera vez que pasa, este año se desbordó el número de sillas perdidas por un notable aumento en el número de peregrinos y decenas de chairos despistados, que siguen celebrando el triunfo de su «morenita» y en plena peda se juntaron con los peregrinos.

Las autoridades ya investigan el asunto con el apoyo de importantes instituciones especialistas en la materia, como los productores de Extranormal, así como el prestigiado investigador Jaime Mausán y Carlos Loret de Mola, que se juntaron para hablar del asunto y hacerse güeyes, mientras la policía federal indaga en tianguis y áreas conocidas por la comercialización de productos robados y malhabidos, como Ecatepec, Cd. Neza y el Congreso de la Unión.

Afirmaron que también les robaron las bolsitas del Oxxo que traían para tirar la basura, por lo que tuvieron que dejarla en la calle. «Pero ya Dios proveerá, porque él todo lo puede, él es poderoso y namás él sabe por qué hace las cosas… Oooooh,alabaré, alabaré, alaaabaré a mi señoooor«, matizó el Poncho, creyente, mientras abandonaba su bolsa de papitas en la banqueta.

Asimismo, miembros del episcopado encabezados por Norberto Rivera, ya negocian con unos gringos los derechos para filmar una película al respecto.