Personas que beben mucho alcohol, podrían ser alcohólicas:

Jamás nadie pensó que pudieran ser alcohólicos.

Ante la calor que azota a todo el país, el consumo de bebidas embriagantes se disparó a niveles nunca antes vistos (desde la última feria del caballo de Texcoco), lo que alarmó a muchos científicos que descubrieron y aceptaron su enfermedad en un grupo de alcohólicos Anónimos.

Investigadores de la UNAC (Universidad Nacional Autónoma de Cacahuamilpan) realizaron un estudio y encontraron que las personas que suelen ingerir grandes cantidades de alcohol, podrían ser alcohólicas, por lo que pidieron al gobierno mexicano alertar a la población de esta situación.

«Encontramos que quienes toman mucha cerveza todos los días, podrían ser alcohólicos. Jamás antes lo pensamos, pero al observar cómo entre más caguamas se empinaban, más perdían sus capacidades cerebrales, logramos deducir que si, son alcohólicas, es decir, adictas al alcohol«, expresó sorprendido uno de los científicos, mientras leía su librito de cuarto y quinto paso.

Hasta apenas el año pasado, a quienes consumían estas cantidades escandalosas de alcohol, se les llamaba «bebedores sociales» y no eran mal vistos, sino que representaban parte del folklor mexicano.

Agregaron que su investigación también arrojó que quienes consumen mucha marihuana, podrían ser marihuanos, quienes fuman mucho podrían ser fumadores y quienes le tiran mucho al gobierno, podrían ser derechairos.

«Nunca vimos algo igual, la verdad es que este estudio podría significar avances tecnológicos y sociales nunca antes vistos«, comentó.

Los miembros del equipo que logró obtener tan impresionantes conclusiones, podrán ser acreedores al premio Nóbel de química el año entrante.

Exigieron que se instalen en las escuelas públicas módulos de AA y que se obligue a los jóvenes a decir la oración «Dios, concédeme serenidad» antes de cada clase, para que Dios o un poder superior como sea que lo conciban, les eche la mano para no caer en las mnalditas pero deliciosas y refrescantes garras del alcohol pues ¡ay, qué pinche rico es!