Papa Francisco revela que no le gusta que le besen el anillo

Dijo que se siente rico, pero le da incomodidad que se lo besen frente a todos.

El Papa Francisco rompió el silencio durante una conferencia de prensa esta mañana en El Vaticano, luego de que uno de los reporteros le preguntara sobre cómo se sentía luego de haber sido jaloneado por una mujer.

Los hechos ocurrieron el pasado 3 de enero, cuando en la Plaza de San Pedro, una señora tiró del brazo del máximo pontífice de la iglesia católica, provocando su inmediato enfado por lo que de un manotazo, se deshizo de dicha mujer.

Luego de lo sucedido, el Papa fue duramente criticado, lo que provocó en él diversos problemas emocionales y psicológicos, debido a que nunca antes se había sentido tan rechazado por sus fieles seguidores.

«Fue muy duro, desde ese día no he podido dormir bien, me levanto en la madrugada, sudando frío y con lágrimas en los ojos. Cuando recuerdo lo que pasó, siento como si hubiera sido tocado indebidamente por un cura pederasta. Yo siempre he manifestado que no me gusta que me besen el anillo, pero parece que entre más lo digo, más lo hacen«, explicó.

De acuerdo a la tradición papal, el anillo que se va heredando de generación en generación de lideres católicos, ha sido besado por muchísimos gobernantes, políticos e incluso, criminales, para lograr obtener la bendición de Diosito, por lo que el anillo del Papa ya está muy besado.

«Siempre está ensalivado, hasta se le escurre la babita de que todos me lo andan besando, quesque porque soy el mayor representante de la iglesia, pero a mi no me gusta, porque luego hace frío y se me hace más chiquito el dedo«, arremetió muy enojado.

Sin embargo, otros papas a lo largo de la historia, siempre han dejado que se lo besen, incluso algunos han sido señalados como fetichistas.

El fallecido Papa Juan Pablo Segundo siempre le ofrecía el aro a los líderes políticos de todos los países, y siempre afirmó que se sentía rico cuando se lo besaban, por eso le gustaba andarselo enseñando a todos.

«Pus dicen que se siente bonito, yo la verdad no sabría decirte porque como te digo, nunca me ha gustado. Mis colegas me dijeron que es cuestión de acostumbrarse, pero quién sabe, sólo Dios sabe por qué hace las cosas«, concluyó muy triste el Papa Francisco.

Se calcula que a la fecha, poco más de medio millón de personas le han besado el anillo al máximo líder de la iglesia católica, por lo que ya advirtieron a los fieles evitar hacerlo porque podrían contagiarse de alguna enfermedad venérea.